La Tierra es Plana

“La terra és plana, ho sap tothom, 
però a les planes hi ha rieres, codinetes i turons.” esta canción de Quimi Portet, ex Último de la Fila e insigne “osonenc”, define perfectamente el recorrido de la Media Maratón de Roda de Ter (Osona). 21 Km que transcurren por una Plana de Vic de continuos “subeybajas”, que no llegan a romperte las piernas, pero si que pueden llegar a quebrarte la moral.
Como es habitual en estas fechas, día fresco y de niebla para destemplar a los frágiles de espíritu llegados al pueblo del poeta Miquel Martí i Pol. En la salida unos 600 corredores, repartidos en dos pruebas de 10 y 21 Km, que, tras compartir 5 Km de recorrido, se separan, unos en dirección a Manlleu y el resto, yo incluido, rumbo a Vic subiendo una larga y progresiva cuesta coronada por la Creu de Roda.
Después, enfilamos rumbo al Polígono industrial, zona en que la orografía nos concede una pequeña tregua hasta el Km 12. Precisamente, en esta parte de la carrera aparece por detrás Edu, un compañero de mi época del FP de La Salle, que me saluda efusivamente y, con la misma efusividad, se aleja de mi, dándome un señor hachazo que envidiaría un aizkolari de Bilbao.
En estas se levanta la niebla y empieza a lucir un esplendido sol en un cielo azul-azul, -aunque con un aire fresquito, ideal para correr-, y paso por la alfombra de los 10 Km en un tiempo oficial de 50:58 (no hay arco de salida, por lo que creo que hay que descontar unos 20”).
A partir del Km 12, la temible recta de la carretera de Manlleu. No es que sea empinada, pero luce un sinfín de subidas laaaaaaaaaaaaargas seguidas de sus buenas bajadas, en una vía ancha que te permite ver el suplicio que te queda; un buen entreno psicológico para la Maratón.
Llegados a Manlleu, Km 18, me encuentro con mi padre, que ha estado también en la salida, dándome unos ánimos que agradezco con toda mi alma (gracias, Miguel).
Enfilamos de nuevo para Roda, con una cochina subida de 200 metros que me acaba de apuntillar el amor propio, seguida de una dulce bajada hasta llegar a meta, adelantado en los últimos metros por dos chavales y dos féminas que, sin duda, tenían más prisa que yo.
Tiempo oficial 01:51:04, el PEOR de mis 5 medias maratones. Pero he disfrutado de una de las MEJORES carreras de mi vida: he corrido a gusto, a pesar de la dureza del recorrido, saludado a un porrón de amigos, mi padre ha venido a compartir mi afición conmigo, (ahora que voy a ser padre quizá valore más estas cosas), la bolsa, los servicios y la atención de la organización EXCEPCIONAL.. ¡Ah! Y encima me ha tocado el primer premio, un fin de semana en Andorra, y eso sin haber ganado…¿Qué más quieres, Maripili?

Les coureurs
Robert Delaunay, 1913


Recupero mi pobre blog que tengo inexcusablemente abandonado.
Falta de tiempo y cierta rebaja de mis aspiraciones correriles podrían explicar mi dejadez. Andamos, además, mi compañera y yo, especialmente ella, inmersos en un feliz embarazo que dura ya 8 meses, con lo que siempre van saliendo imprevistos. Pero que queréis que os diga; ojala todos mis imprevistos fueran de este tipo.
De todos modos no puedo quejarme, desde la vuelta del verano voy rascando tiempo para hacer cuatro resoplidos y humedecer la camiseta como mínimo un par o tres de veces por semana. El problema es que las series no forman parte de mis rutinas, así que los tiempos no mejoran significativamente:

Junio Can Mercader-Almeda 47:05
Vacaciones
Septiembre 10K Poble Nou 50:40
Semptiembre 10 K Cursa de la Mercè 50:10
Septiembre El Prat de Llobregat 49:35
Mejor tiempo 10 K enero 45:52

Como podéis ver, estoy en una velocidad crucero de 5’. Cómodo, pero no para estar orgulloso.
Este fin de semana participo en la media de Roda de Ter, cerca de Manlleu (Osona), mi pueblo “ de toda la vida” -ahora vivo en Barcelona-. Lo jodido es que cada vez que corro en casa me salen unas carreras de pena y algunos de mis "amigos" de la comarca meten unos hachazos que me dejan con la moral para colgar las zapas y con los cordones, colgarme yo.
En fin… será la presión de “jugar en casa”.

Entre trigales

El domingo corrí en Tárrega (Lleida). La marca quedó muy lejos de lo que yo tenía previsto (1:49:07), pero tengo que reconocer que disfruté como un enano.
Valió la pena levantarse a las 6 de la mañana y hacer una hora y media de carretera desde Barcelona. La capital de la comarca del Urgell nos acogió con un brillante día soleado, pero con una refrescante brisa que atenuaba el calor. La mayor parte del recorrido trascurrió por fuera del casco urbano,-mixto tierra-asfalto-, entre campos de trigo de espiga de un intensísimo verde. La organización estuvo más que bien, amable y atenta las necesidades de los corredores tanto durante la ruta como en la llegada. Desde aquí, felicito a los responsables por su gran trabajo y ni decir tiene que recomiendo a todos la Media Maratón de Tárrega.
Tan sólo dos pequeños peros: al no participar mucha gente durante bastante rato tienes que correr sólo, y para el avituallamiento de bebida isotónica usaron esos malditos vasos de cartón. ¡Joder! parecía mi sobrina de un año intentando beber sin el biberón…¿Alguien conoce la fórmula secreta para beber en ellos, sin que te caiga todo por encima o en los ojos? Otro de mis innumerables defectos es que soy miope, por lo que corro con lentillas o gafas, así que además de ahogarme me puedo estampar.
En fin, aparte esto, como he dicho, magnifico día para correr. De los cuatro compañeros del club que fuimos, -Jaume, Asensi, Mónica y un servidor-, el mejor, el debutante: su primera media y la resuelve en 1:43 (GRANDE, Jaume). Asensi se equivocó de recorrido, a pesar del enorme cartel que indicaba DERECHA cuarto IZQUIERDA Media, y se chupó un kilómetro más. Ni corto ni perezoso se subió a la moto de un Mosso para que le llevara un trozo, pero el agente le hizo bajar; sería porque no llevaba casco ☺. Mónica también estuvo magnifica. A pesar de su lesión de rodilla del día de Bombers, acabó la quart de marató en unos buenos 57 minutos.
Yo no ando aún al 100% de forma, pero aguanté bien la distancia, salvo por una pájara entre los Kms 7-9 que felizmente pude remontar. Empecé fuerte, a 4: 25 los dos primeros Km, pero sendas cuestas de los puentes sobre la autovía me rompieron el ritmo hasta la pájara. Después me sentí más cómodo y logré estabilizarme en los 5’20 y disfrutar del sol y el paisaje de una soleada mañana de carreras en la “Terra Ferma”.

Buen ritmo

Objetivo cumplido. Exceptuando el viernes, tras terminar mi cursillo de “Creación de páginas Web” llegue a casa a las 11 de la noche, he logrado salir a correr todos los días del puente entre una hora y hora y media. La cinta del gym ha sido sustituida por el frente marítimo de la Barceloneta, lo que ha permitido que el 30 de abril tuviera lugar mi primer baño de mar 2007, --corrí 25 minutos matutinos hasta la zona nudista, me despelote, me bañe y volví a casa trotando otros 30 minutos- y ver desde fuera la Feria de Abril, aunque no me atreví a entrar oliendo a gorrino y sin mallas de “faralaes”.
Ayer volví al gimnasio para hacer entreno cruzado. Treinta minutos de cinta y otros tantos de máquina de esquí, aderezados con un centenar de “adbominables”. Cruzar carrera con la máquina de marras y el spinning me ayuda a no forzar la maquinaria -rodillas y articulaciones varias-, no hace tan monótono el entreno y, gracias a la máquina que yo llamo de esquí (esa que corres sobre dos plataformas ayudado con bastones), gano velocidad, según la teoría de uno de los monitores del gym con experiencia en esto de entrenar runners
Por cierto, la Operación Bikini continúa a tutiplén. Tuve que esperar un rato para utilizar una de las seis cintas. Ocupación: 4 chicas, 1 chico y una máquina averiada, un 80 % femenino, el 60 si contamos el nulo de la avería, que viene a confirmar la observación de la entrada anterior.
En fin, las sensaciones, aunque con las piernas algo cansadas, han sido muy buenas y mentalmente empiezo a notarme más fuerte, por lo que he decidido apuntarme a la Media maratón de Tarrega. Ya veremos, como va la cosa…

Vuelta al Tajo

¡Por fin! ¡Pep is back!
He vuelto a correr dos días seguidos después de la maratón.
Aunque han sido únicamente sesiones de media horita en la cinta del gimnasio, con sus consecuentes odiosas tanda de abdominales y pesas en el tren inferior, las sensaciones han sido excelentes. He podido rodar a unos buenos 5' el Km, lo que, curiosamente, traducido a mi ritmo de calle serían 4:40. Hoy me toca una tirada de una hora por el puerto y, fantástica noticia, me muero de ganas de hacerla, no como hasta ahora que entre sesiones pasaban dos y tres días...
Es divertido ir al gym estos días. Ha empezado la "estampida" bikini y las salas se llenan de gente sufriendo por lucir tipo playero, especialmente féminas. Se nota porque tienes que hacer cola para poder subir a alguna de las seis máquinas de correr y la mayoría de sus usuarios son chicas. La verdad es que se hace agradable ver más caras y curvas femeninas en lugar de las de los profesionales del músculo haciendo contorsiones ante el espejo. La lástima es que la mayoría ni te hablan, deben pensar que sólo pretendes ligar con ellas. En fin, de aquí un mes aproximadamente la mayoría de bikineros/as se habrá aburrido y, desgraciadamente, dejarán de aparecer por el gym...
Este puente, tengo previsto dedicarlo a hacer tiradas largas de 60 a 90 minutos, de cara a prepararar la media maratón de Tarrega del día 5 de mayo. Creo que, junto a la de la Garrotxa que se hace el mismo día, es la última de la temporada en Cataluña hasta septiembre y será cuestión de ir preparado y disfrutarla. El objetivo es correrla en 1:40 (mi mejor marca de este año es 1:38). Para ello tendré que reducir algo de panza y continuar con el buen ánimo de los últimos días. Ya veremos...

Al reves

Antes de nada un saludo a todos; sed bienvenidos a mi humilde rincón.
La mayoría de blogs de corredores suelen ser una especie de diario al que rendir cuentas al iniciar un gran reto. En mi caso es al revés: inicio esta bitácora depués de haber acabado el mio: mi primer maratón, una experiencia que sólo puedo calificar como extraordinaria.
Llevo en esto de correr un año y medio. Poco podía pensar el pasado mes de septiembre, al finalizar el Camino de Santiago en bici, que lograría acometer la prueba reina de los corredores populares. El culpable de todo fue un atleta malagueño, compañero de viaje de la ruta jacobea, que me animó a probarlo y me regaló un valioso consejo: "Lo importante es acabar la maratón con dignidad y disfrutando". Tras meses de entreno, siguiendo el consejo al pie de la letra cruce la meta del Maratón de Barcelona con una sonrisa en la cara -fotos hay que lo atestiguan -, con un montón de buenos ratos acumulados en los entrenos y carreras de preparación y una marca que a mis ojos no está mal: 3h:38:34 (tiempo real); el 1001 de mi categoría-¡Bonito número, caramba!
Ahora, tracurrido un mes y pico de la carrera, me encuentro en un limbo correril, sin una meta clara a la que acogerme. Los entrenos se me hacen más dispersos, me encuentro pesado y lento y he vuelto a tontear con el máldito tabaco. La mi última carrera de 10 Km, la dels Bombers, pase de los 47 minutos cuando mi mejor marca en esta distancia es de 43':54 !Una debacle moral y física!
En fin, tendré que hacer borrón y cuenta nueva y ponerme de nuevo las pilas...